Nostalgia de carnaval

por JUAN LUIS MEJÍA • Fotografías Archivo BPP

Número 61 Noviembre 2014

Medellín, siendo una villa de corrales en torno a sus varias iglesias, celebraba cada tanto carnavales improvisados: se buscaba una excusa patriótica o religiosa, se pedía permiso al alcalde y comenzaba el desorden de burlas, comparsas, desfiles, toros, pólvora y alcohol. El teatro social trocaba sus máscaras. Pero el palacio municipal y las parroquias se cansaron de las zumbas y un decreto prohibió la confusión en 1916. ¿Cómo serían los carnavales en esta villa de tres millones largos?